domingo, 4 de marzo de 2012

Asesinos de mascotas

Un carro atropelló a mi perro anoche, matándolo instantáneamente. No me pude despedir, no lo pude ver como dormido y al imbécil que lo mató, ni le importó dejar desoladas a seis personas. 

 Dicen que no hay que desearle mal a nadie, pero ¿qué más se puede sentir por alguien que asesinó a alguien de tu familia si no es odio?

Mi perrito iba a cumplir trece años este miércoles. Era blanco y tan temperamental como todos los de esta casa.

2 comentarios: